viernes, 18 de febrero de 2011

El compromiso

Poner en juego nuestras capacidades para sacar adelante todo aquello que se nos ha confiado y nuestra conciencia ha aceptado, eso es el compromiso.
Una persona comprometida es aquella que cumple con sus obligaciones haciendo un poco más de lo esperado al grado de sorprender, porque vive, piensa y proyecta sus energías para sacar adelante todo aquello que su reflexión le dicta. Todos tenemos compromisos de diversa índole. Aún así, hay personas que esperan que exista un contrato, una promesa o una ineludible consecuencia para saberse en un compromiso. El verdadero comprom
iso nace desde nuestro interior y tiene como fundamento el conocimiento y la reflexión. No puede existir el compromiso desde la ignorancia. El hecho de aceptar “formalmente” un compromiso, hace suponer que se conocen todos los aspectos, alcances y obligaciones que conlleva. No basta con cumplir con lo previsto, lo estipulado, lo obvio... todo compromiso tiene muchas implicaciones. La persona comprometida es generosa, busca como dar más afecto, cariño, esfuerzo, bienestar... en otras palabras: va más allá de lo que supone en principio el deber contraído. Es feliz con lo que hace hasta el punto de no ver el compromiso como una carga, sino como el medio ideal para perfeccionar su persona a través del servicio a los demás. Antes de comprometerte con algo, piensa primero si podrías salir de aquello, sin tomar en cuenta lo que te ofrezcan los demás.


No hay comentarios:

Publicar un comentario